2013-11-26

Cómplices debajo de la mesa

El momento, el mas inesperado de todos....
Salir de la rutina de lo cotidiano y volverse a un espacio inusual, pero que atraviesas continuamente.
La hora, es la que uno cree que está todo el mundo pero la verdad estaba despejado.
Dos sillas, una mesa, y la adrenalina empieza a correr cuando llegas y la ves ahí...sentada.
Y Yo que creía que no iba a ir!,
El lugar abierto y más expuesta para donde, pero eso no importaba con tal de verla.
Titiritaba de frío, me inclino a saludarla dándole un beso en la mejilla y al tocarla en la espalda esta mojado su saco.... La empiezo a tocar en varias partes del brazo... Y si, toda ella esta mojada.
Quítate el saco, eso te hace daño!
Un tinto y una aromática inusual y la conversación de lo cotidiano con risas y miradas continuas, agachadas de mirada, evitada de miradas
un lugar para exponerse y nosotras dos.

Los dos personajes se miran, se inclinan hacia el frente de la mesa manifestando sus anhelos de querer tocarse, de acariciarse.... Pero aún con tanta ausencia en el recinto no es fácil no exponerse, y deciden que las piernas serán su contacto...
Bajo la mesa el deseo se expresa, se siente, se roza.... las rodillas poco a poco se palpan la una a la otra, las piernas se mueven para atraerse y al final.... Las piernas se entrecruzan
Y con el frío del día, los pies mojados, las medias empapadas, junto a unos zapatos secos y unas medias y pantalones secos, ellas se juntan en un intento por calentarse, por cuidarse, por acercarse, por besarse.... Y así cómplices debajo de la mesa se dicen que se desean, se dicen que se quieren.... Se besan las piernas, se besan sin hacerlo directamente... Se extrañan, se quieren y ahí están, queriendo hacer el rato eterno...
Entregando el saco para que ella se caliente mejor, cuando lo que se quiere es abrazarla directamente para que se caliente.
A los Cómplices bajo la mesa se les acaba el tiempo pero parece que saben que se dijeron todo y más de lo que esperaban.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Oma